CAJAS DE BIENVENIDA

En esta temporada festiva, únase a nosotros para crear cajas de bienvenida para los niños que ingresan a hogares de cuidado. Los trabajadores sociales les dan estas cajas a los niños, llenas de artículos apropiados para su edad, para ayudarlos a ocupar su tiempo mientras hacen la transición a un nuevo hogar de cuidado y adopción. Muchos llegan con solo algunas pertenencias personales, por lo que la comodidad que brinda una caja de bienvenida es invaluable. Es una forma simple pero poderosa de reflejar el amor y el cuidado de Dios por los niños vulnerables de nuestra comunidad, y una oportunidad significativa para involucrar a toda su familia.

A continuación te explicamos cómo llenar tu caja.

Aquí tienes una guía sencilla para llenar una caja de bienvenida con elementos creativos y adecuados a la edad. Llena la caja con todos los elementos de la lista Esencial y diferentes elementos de la lista Extra hasta llenarla hasta el tope.

1. Compra una caja de plástico para guardar fotos o recuerdos:

2. Decide para quién será la caja de bienvenida:

3. Escribe una nota de aliento:

4. Ciérrala:

5. Entrégala:

Para obtener detalles completos, descargue el PDF a continuación.

Aquí está el porque.

La mayoría de los niños que llegan a hogares de acogida deben esperar en una oficina de Bienestar Infantil durante al menos dos horas mientras un asistente social intenta encontrarles un lugar adecuado para vivir. Como puede imaginar, este es un momento de gran ansiedad para los niños. Recientemente sacados de su hogar, el futuro de un niño ahora es incierto. El concepto de una Caja de bienvenida es simple: mientras el niño espera en la oficina, un asistente social le da una caja con artículos apropiados para su edad para que se entretenga. Se llevarán esta caja con ellos a su nuevo hogar de acogida. Dado que muchos niños entran a hogares de acogida con solo unas pocas pertenencias personales, la importancia psicológica de estas Cajas de bienvenida no se puede subestimar. Hacer una Caja de bienvenida es una forma sencilla de consolar a un niño que entra a hogares de acogida. Y es una excelente manera de involucrar a toda su familia en el cuidado de los niños de nuestra comunidad.